Hace algunas semanas, aprovechamos el fall break (una semana de vacaciones porque sí al medio del semestre) de la universidad de Igor para hacer un paseo a Las Vegas. Ninguno de los dos había ido a Las Vegas, principalmente por privilegiar conocer otros lugares que nos parecen más interesantes. Sin embargo, considerando que está a sólo 6 horas de viaje en auto de donde vivimos, hace un tiempo concluí que ese es uno de los lugares que quería conocer antes de irme de Utah. Yo sé que Las Vegas no está en Utah actualmente (en el pasado lo fue), está en Nevada, pero está cerca. Los otros lugares son Canyonlands, y subir el Timpanogos.
Fuimos a Las Vegas con la única expectativa de matar la curiosidad de saber cómo era la ciudad, descansar de la rutina, y ver gente caminando en la calle. Aquí en el condado de Utah es raro ver mucha gente caminando en la calle. Como fuimos con un bebé de 7 meses, no podíamos esperar mucho más.
Fue nuestro primer viaje en familia de 3, y mi bebé se portó muy bien para mi sorpresa. El hotel era muy bonito y cómodo, con muchas piscinas, y relativamente cerca del centro turístico de la ciudad.
Conocimos sólo una pequeña parte, hay mucho más que conocer, solamente nos faltó el estado físico y las ganas de caminar lo suficiente para ver todo, pero caminamos MUCHO. Sólo desde la entrada del casino del hotel hasta nuestra habitación era unos 15-20 minutos caminando si es que no nos perdíamos.
Estas son algunas fotos del interior y exterior de algunos Casinos/Hoteles.
Viajar con un bebé es todo un mundo nuevo para mí. Yo no tenía la menor idea de que los hoteles tienen cunas disponibles, y así como los baños tienen shampoo, acondicionador, y crema, si uno va con un bebé también tienen jabón de bebé, talco, crema, paños humedecidos, etc.
Nos dimos cuenta de que Las Vegas no es un lugar donde hay muchos bebés. Samuel fue la gran atracción de la ciudad. Por donde pasaba había personas que querían conversarle y hacerle cariño.
Mi gran sorpresa fue descubrir una tienda Ross (una de mis favoritas donde venden vestidos baratos) en la calle principal de los casinos (Las Vegas Boulevard). Me pareció increíble que los precios eran igual de bajos que las Ross de otros lugares, pero con mucha más variedad de vestidos.
Conocimos también por fuera el Templo de Las Vegas. El 12% de la población de la ciudad se considera miembro de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
Este templo fue dedicado el 16 de diciembre de 1989.
El hotel tenía una piscina por cada torre y además todas las piscinas del MGM Grand.
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